Actualmente estoy a 7 km de la carretera principal en un pueblo llamado Quebrada Grande en la provincia de Guanacaste .
Salí esta mañana de Playa del Cocos para recorrer nada más y nada menos que 80 km. Fue un día muy difícil. Pedaleé durante más de 6 horas para cubrir esta distancia a una velocidad promedio de 12,7 km/h. Las carreteras en Costa Rica son muy peligrosas, hay muchos autos. Es cierto que durante mi viaje a Cuba los autos eran más raros. ¡¡¡Me levanté muy temprano esta mañana, hice las maletas y conocí a mi anfitrión Walter por primera vez porque llegó a casa a las dos de la mañana!!! Es chef en un hotel y tuvo que cocinar para los invitados hambrientos en Nochebuena. Tomé un café y un panecillo de queso.
Luego me dirigí a playa hermosa. El camino es difícil, hay varias subidas.
No me quedo en la playa porque me queda un largo camino por recorrer. El camino recorrido por esta parte es más agradable. Mientras subía una colina enorme pasé por un bar, pero no recuerdo el nombre. ¡Este bar se veía realmente genial, pero no recuerdo por qué! Tomé una foto de todos modos.
Estoy viajando por un pequeño camino en un pequeño pueblo llamado Guardia. Finalmente pude hablar con verdaderos “ Costarricenses ” y pude ver sus casas.
Tengo que tomar el camino de regreso al aeropuerto, es muy peligroso y hace mucho viento en el camino a Liberia. Veo un cartel que demuestra que el capitalismo está muy arraigado en Costa Rica: un anuncio de un Walmart.
Tomo un pequeño descanso y me alimento un poco con una empanada con un poquito de pollo adentro.
En el camino veo una ferretería que vende tablones de madera que miden 46 pies, es impresionante.
Parece que soy una hormiga frente a una valla. Después de varios minutos me encuentro con el famoso Walmart que también abre el día de Navidad!!!
¡¡¡Es increíble!!! Es el nuevo templo de Dios. ¡¡¡Varios discípulos se reunieron para esta gran celebración!!!
Finalmente llego a Liberia, pero no estoy entusiasmado con el lugar. No me gustan las ciudades con McDonald's, Taco Bell o PFK. Descanso en un pequeño parque y aprovecho la red celular. Estoy cansado y sólo he recorrido 46km.
Después de varios minutos de descanso, tengo ganas de continuar el camino. Por primera vez tomo la Panamericana que atraviesa todos los países de Centroamérica. ¡Veo ciclistas en la carretera y decido seguirlos! Al cabo de unos instantes, por una carretera secundaria llego a un magnífico lugar donde se puede nadar. Un hombre me da ron... ¿qué más quieres?
Es una gran reunión para la gente que hace barbacoas sobre el fuego.
Después de 20 minutos de discusión y relajación, volví a la carretera. El viento es fuerte, pero esta vez colabora conmigo. Decido hacer una pequeña pausa un poco más tarde por un sendero adyacente a la carretera principal.
Conozco una familia que me regala una cerveza, la gente es agradable.
Para divertirlos les pido si puedo tener una fotito de recuerdo... en el auto.
Vuelvo a montar y me encuentro con un joven ciclista que va muy rápido.
Como puedes ver el hombro es muy pequeño. Creo haber llegado a mi destino cuando veo que el pueblo de Quebrada Grande está a 7km. Lo creas o no, tardé más de una hora en recorrer esta corta distancia debido a un viento desproporcionadamente persistente que descornaba a los bueyes todos los días.
Finalmente llego al pueblo, estoy exhausto... Entro en una pizzería y pregunto si hay habitaciones para alquilar cerca.
No estoy en una zona turística en absoluto. Pido ayuda, el servidor intenta algunas llamadas pero sin éxito. Así que decido llenar mi estómago mientras espero que se resuelva la situación.
Mientras tanto, me encuentro con el peluquero que trabaja al lado. Me entero que es nicaragüense y se llama David!!! Viene a trabajar aquí durante 26 días y luego regresa a su pueblo en Nicaragua para ver a su amada. La gente es generosa y trabajadora. Comparto mi pizza con él.
Finalmente, mi nuevo amigo me sugiere dormir en su gran habitación situada detrás de la peluquería.
Negocio un corte de pelo incluido en el precio de esta habitación improvisada.
Pago $12 USD por mi colchón y mi corte de pelo. Es en estas increíbles aventuras que me voy a acostar, pero primero voy a intentar darme una ducha en el baño que no tiene luz, porque está quemado. ¡Sedoso y generoso!
David Beauchesne